2085-TLC-analisisRSD-LR-jun04

Archivo OBSERVAMED: Publicación Sin Animo de Lucro. Archivo de artículos y publicaciones para ser consultados cuando la fuente original no se encuentre disponible. Ver dirección original y créditos al final de la página.

El TLC se sentirá en el precio de los fármacos
Ricardo Santamaría Daza

En Colombia la caja de una pastilla de Viagra alcanza los 24.480 pesos, un precio muy por encima de los genéricos de su tipo, como el Eroxim que cuesta 11.660 pesos o el Ejertol que se consigue en el mercado por cerca de 8.300 pesos.

Estos medicamentos pertenecen a un comercio cuyas condiciones jurídicas para su explotación se discuten en las negociaciones del Tratado de Libre Comercio entre Colombia y Estados Unidos.
Si se estableciera la patente para un producto como el Viagra, cuyos efectos en el tratamiento de la disfunción eréctil se descubrieron luego de ser patentado para otro tratamiento, (lo que se denomina segundo uso), es muy posible que tengan que salir del mercado los genéricos de este tipo que existen en el país.
Eso quiere decir que se reduciría la elección de los consumidores a la hora de adquirir el producto y si de precios se trata, limitaría el acceso a los colombianos que no tienen los 24.480 pesos para comprar Viagra.
El caso de este producto es uno en particular, pero una situación similar podría presentarse si la patente a los segundos usos implicara en un momento dado a otros genéricos, incluso a los que cubre el POS (Plan Obligatorio de Salud), conformado en su mayoría por este tipo de medicamentos.
"Bien podría suceder que un genérico del POS salga del mercado por virtud de las barreras comerciales de Estados Unidos", dice al respecto Germán Holguín Zamorano, director General de la Fundación Misión Salud, coordinador de un análisis de varias ONG"s y la Conferencia Episcopal de Colombia, en el que se advierte el impacto sobre los precios de los medicamentos y la salud pública en el TLC y el Alca.
Según estas organizaciones, en el caso de Colombia, Perú, Ecuador y Bolivia, el país norteamericano ha anunciado públicamente que su objetivo con el TLC es que los países andinos protejan los derechos de propiedad intelectual, en línea con las leyes y prácticas estadounidenses. La situación implicaría serios riesgos para el acceso a los medicamentos y el bienestar en general.
Una de las barreras para las medicinas de bajo precio, comprendidas en la agenda norteamericana para las negociaciones es el reconocimiento de patente a los segundos usos. "Estas carecen de novedad y nivel inventivo y, por lo tanto, de justificación económica. Podría generar multitud de patentes de sustancias conocidas y patentamientos vitalicios. Por este medio, Estados Unidos pretende el patentamiento de hasta la Aspirina, producto que se encuentra en el mercado hace más de cien años", dice el director de Misión Salud.
Otro caso que se relaciona con el tema de los fármacos en Colombia, tiene que ver con la protección de los datos que divulgan los laboratorios al Invima para obtener el registro sanitario de un medicamento.
Recientemente, el presidente de gremio de los laboratorios nacionales (Asinar), Alberto Bravo Borda, dijo que la contraprestación para las empresas que investigan y crean el componente nuevo que da origen a un medicamento, (un monopolio amparado por el decreto 2085), se está otorgando a productos farmacéuticos ampliamente conocidos en la comunidad científica mundial y que no han ameritado un esfuerzo considerable.

Más barreras
Las condiciones de Estados Unidos en propiedad intelectual y que espera sean incluidas en el TLC para proteger sus intereses, son agresivas. Superan incluso los niveles de protección consagrados en la normatividad de la OMC.
Una de ellas es la extensión del término de las patentes, más allá de los 20 años que establece la OMC. Estados Unidos plantea aumentar la vigencia de una patente para compensar las demoras injustificadas que se produzcan en la aprobación.
Lo mismo aplicaría para compensar al titular de la patente por la reducción injustificada del plazo de 20 años, como consecuencia de las demoras en el proceso de autorización de su comercialización.
"De suceder esto, a Colombia le pasaría lo de Chile, que otorgó monopolio por 25 años o más, algo que no ocurre ni siquiera en Estados Unidos ni en la mayoría de países, donde el plazo es de 20 años, más que suficientes", afirma Holguín Zamorano, quien además participó en el "Cuarto del Lado", en la primera ronda de negociaciones del TLC, llevado a cabo en Cartagena.

Precios al alza

Colombia muestra un bajo promedio en el precio de los medicamentos si se compara con otros países latinoamericanos. Según la escala del IMS Health 2003, firma que mide los precios de la industria farmacéutica en la región, el promedio en el país está muy por debajo de la mayoría de países de América Latina.
En ese sentido, los expertos no descartan que por efecto de las barreras para los medicamentos, los precios promedios en Colombia alcancen los registrados en México, el segundo país más costoso en la región (ver tabla).
Según Misión Salud, está demostrado que el instrumento más eficaz para doblegar los precios de las medicinas y mejorar el acceso es el fortalecimiento de la competencia, que en el caso de Colombia ha permitido que la diferencia de precios entre medicamentos inventados por las multinacionales farmacéuticas y sus competidores (de marca nacional o genéricos), sea de 100 a 25 pesos.